hagamos poesía
Quiero que me toques hasta que se acabe la noche y luego hagamos de la claridad un continuo sin tiempo los sonidos serán claves de las horas el perro solitario que deambula en la ciudad el pájaro que presiente la madrugada los gorgeos del mediodía las cigarras que se animan con el calor el viento que ahora mueve las cortinas golpea el vidrio se apacigua pero yo no no duermo te busco te respiro te acaricio como remojándome las manos o la entrepierna la onda se vuelve ola te levanto te acomodo te acerco al enjambre que produzco con mis dedos, con mi boca solo gestos en los ojos no hay iris las pupilas destellan es todo luz y la música de tu respirar, el tambor de nuestro latido siento cada músculo, tendones y huesos hay un momento donde el espacio desaparece desaparecemos en las estrellas que generamos pura luz es el cuerpo, la materia se deshace de cualquier ajenidad, extranjería un silencio como huevo...