No hay forma pero sí




Poesía
Amor
Idea
Verdad
Compromiso
Confianza
Grandes palabras
No entiendo nada, no entiendo ninguna
Cuando empiezo a desenvolverlas se parten, como si adentro
la forma envuelta
fuera arena
se escurren
granos mínimos que pinchan, incomodan
arena en la sábana que me envuelve
espinas como pelos diminutos.

Te miro y te digo
Te amo
entonces si me contestás
Y qué? 
Cómo sigo

No hay forma, pero sí.

Está enrevesado, atravesado, pero sí.
Espinoso, enjambrado, aguijoneado.
Pero sí.

La forma te la da una nube
que cambia mientras se desliza pulposa en el celeste
el viento que arremolina hojas, acuna copas verde flúo,
esos lapachos, rosas y amarillos, a flor plena
La forma te la da mirar
el río de noche sin estrellas
oscuridad pura pero arriba flujos de luz
un árbol vestido de blanco nieve, estridente y perplejo
en la sombra del anochecer lento de primavera
La forma te la da sentir
el frío de la puesta del sol que por ubicación
no vemos ahogarse
un gato se acerca y husmea mi cartera
es perfecto
me escudriña subido al banco de plaza 
con ojos aceitunados, árabes
no parpadea, no duda
sabe lo que busca
insiste, permanece y yo
no entiendo
pregunto por qué o para qué
me agito para que se vaya.

El olor del río está en el aire, nos refresca las emociones
apelmazadas
el embargo del cuerpo vapuleado por truenos de conceptos
atormentado por ideas incontrastables
por el páramo blanco y desolador que generamos para deambular.

El río que a esta hora no se ve
está mudo
y nos refresca el rosario
de palabras enlazadas, arrojadas como perlas
como uvas a la fosa común
ahí habremos de caminar
ahí habremos de hundirnos 
sintiendo como estallan en nuestros pies las palabras maduras, pisadas
ya no parecen grandes
ya no se distinguen en el mosto pegajoso y dulce.

Quizás esto sea un desastre
querer decir, querer amar
vos no lo dudás en ese momento
quizás quedemos impregnados
manchados de pies a cabeza
un desastre de olor rancio
no hay forma de saber
quizás me descomponga, me dé asco o impotencia
no hay forma pero
escucharte
escucharlos
escucharme
refresca como el río
los pétalos que el viento separó
se suspenden en el aire
removidos permanecen
flotan dando vueltas
me parece
una obvia, natural, comparación
unas palomas chocan contra la ventana
se buscan desesperadas
quieren aparearse
viven en la ciudad que las expulsa
vuelan y chocan
vuelven a intentarlo
su estruendo intermitente en el vidrio
me estremece
grandes palabras se deshacen en mí
el tiempo que estoy ahí
mirándote
todo ese tiempo
brevísimo
contra el vidrio choca
palomas, perlas, palabras
ellas chocan
me trizo
quieren aparearse indubitablemente
en vuelo atropellado
impactan, y sin embargo
algunas lo logran.

Te amo
Y qué
Todojuntotedigo.

No hay grandes palabras.
Esta oración no es mágica.
Tiendo mi mano llena de arena.
Quizás brille una perla, un pétalo, una pluma, un pelo salvaje.
Mínima chance.

No hay forma
pero sí
hay.



km. 2016, Rosario con Siempre de Viaje y Viajera Editorial, en busca del poema en el Festival Internacional de Poesía. 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Alguien postea una foto de Gabriela Sabatini

c o r a z ó n

Me preguntaste si era feliz