Enamorada 3


 
Mi globo y yo


Sólo una idea
sin aristas
redondeada y abierta
esponjosa
suave
pastel desgranado
pálido
un nombre viene con ella
y se hizo real en el cuerpo:
nervios, calor, latidos que ahogan el aire que no alcanza
el Mundo no alcanza
porque el yo se hincha
se ensancha de emoción
yo que siente
yo que encarna
yo que despierta yo
qué siento
entre amargada y feliz
mientras la idea-nombre-imagen-sensación
permanece en mí
inflada como un globo
entre nubes algodonosas y cielo celeste plano de cuento
que me apaña, colcha infantil
envuelta en mi cama
sola
voy caminando sola y apurada
a veces me tropiezo
me doblo el pie o me choco con alguien
y sigo
como si nada
voy en mi idea
abrazando cerebralmente al amor
lo inventé hace tiempo
basado en una historia real
hallmark
ningún condimento falta
-soy una gran escritora-
hay inocencia, juventud, dolor, cierta belleza
no tradicional
pero sí
mucho old fashioned, home-made, organic
love
¡oh sí!
¡es amor!
voy caminando tan enamorada
y a veces
aunque me tropiezo me choco me caigo
sigo caminando erguida
porque mi Idea
Importante
me sostiene
y con apunte de sonrisa en los labios
me digo
-¡Qué suerte tengo!- o quizás
mejor,
-¡Qué afortunada soy!
(de verdad pienso estas palabras)
o también
-¡Qué historia estoy viviendo!
y soy la heroína, la amada, la amante,
más amante soy,
sí, sin lugar a dudas
"eso" soy
y sigo caminando,
en inglés hay varias palabras
para sonrisa
que no tengo
y se vuelve casi cicatriz
se traban los dientes, encastra
quedo con una leve
(apertura) separación
de labios
línea gruesa con pequeños paralelos
costuras en mi cara
no puedo ver, sólo imagino
sobreimprimo
los ojos son huevos de animé
congelados
y sigo caminando,
nadie nota nada.

¡Maravilloso!
Verdaderamente increíble
puedo sentir ahora
una lágrima caliente, inflada
una bola de naftalina o un
rídiculo globo blando
que me tapa la cara por completo
y nadie lo ve
nota nada
nadie registra y camina
y estamos en movimiento
continuo
en una amplia avenida en una
mediana ciudad
en un país
enterrado
y me sumerjo
todavía más
al sur
en el subterráneo
rígida
atascada
y nadie nota nada
el globo blanco pegado en mi cara
constante y caliente
agudo aunque redondo
como un extraño
punzó,
trato de ver, disimulando
detrás de los lentes y el globo
borroso veo, pero puedo
seguir
caminando
bajar
del subte
atravesar
otra larguísima cuadra
subir pisos infinitos en una torre
llegar a un departamento atiborrado
enano
para entrar
cómo cuesta
mi globo y yo
vamos inseguros
nos derrumbamos en el sillón
prendemos radio, televisión, estufa, horno
todo lo que llene más y más
el hartazgo
en el nivel más alto
de complejidad sonora y respiratoria
lo logramos
mi globo y yo
cerramos los ojos
y así la idea primera
la maldita idea que había al comienzo
nombre-imagen-sensación
queda apagada
en stand-by
silenciosa
me voy durmiendo
hasta que los ruidos
el frío o el dolor de los lentes quemándome un ojo
me levantan, ya noche
en el piso solo y repleto
y poco después, abren la puerta
corren la piedra
todavía no miro, prefiero
escaparme
a otra habitación
esquivo la entrada
me escondo en el baño
me río para adentro
y el globo enrojece
rojísimo y brillante
una manzana de Eva perfecta
puramente roja, sin rayas
luna creciente
un tiempo
aguanto, aguanto, un minuto más
mientras, desde la cocina
vienen sonidos
como si hubiera entrado un ladrón
o un ratón arañara su comida
¡pero no!
Yo sé quién es
sí, sí sí,              sí sé.
¡Al fin!
¡El fin!
La ansiada llegada al hogar.
Te veo.
Te beso
sin el globo de por medio, pero
casi en el mismo instante
casi en el mismo beso
o en su final
me empiezo a alejar
sin controlarlo
me voy
poco a poco
me alzo
poco a poco
te vas
haciendo chico
cada vez te veo
más chico
ahí
abajo
me parece
quedás sorprendido
pero no preocupado
de no encontrarme
o de perderme.
Atravieso el techo
pero igual puedo
verte
tu cabeza al lado de la heladera
abrís y cerrás
tu cabeza se corre un poco
tranquilo
te sentás
agarrás lápiz y papel
empezás
una nueva lista
de supermercado
-supongo, no distingo-.
Más tarde
en el cielo de la noche
frío, inaccesible
te veo salir
sin más
otra vez.

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